Hoy cumple años un querido amigo apellidado Stewart. Por eso dedicamos esta entrada al escudo de un linaje de ese apellido.
Fotos del libro "Memorias del doctor Gulllermo Stewart", de Yolanda C. Stewart Sellitti, que tomanos en enero en el Museo del Cabildo de Asunción |
Entre los antepasados de mi amigo se encuentra el doctor Guillermo Stewart, médico de origen escocés, quien fue Jefe de Sanidad Militar del Paraguay durante la Guerra de la Triple Alianza y luego, por largos años, colaboró con el Paraguay en diversos aspectos de su reconstrucción.
Era hijo de William Stewart y Catherine Mac Farlane. Nació en 1830. Participó de la Guerra de Crimea (1854/55) como miembro de la Sanidad Militar y luego se trasladó al Río de la Plata; contratado por el gobierno paraguayo llegó a Asunción en 1857. Junto a otros cirujanos y farmacéuticos europeos, organizó la Sanidad Militar paraguaya. Se le concedió la jerarquía de coronel de Sanidad y fue jefe del Servicio, hasta su caída en poder de los brasileños, en diciembre de 1868.
En reconocimiento de sus méritos, el Dr. Stewart fue condecorado con la Orden Nacional del Mérito.
En la postguerra, el doctor Stewart tuvo calificada trayectoria profesional; organizó el hospital y el servicio de vacunación y fue catedrático de Clínica Médica en la Facultad de Medicina, desde su reapertura en 1898.
Contrajo matrimonio en 1864 con la paraguaya Venancia Triay. Venancia era hija de Manuel José Triay y Tránsito Dolores Yegros, de sangre prócer; pero, huérfana desde muy tierna edad, quedó a cargo de su tía Manuela Yegros, casada con Miguel Báez, sin descendientes, quienes la criaron como hija.
Stewart tuvo tres hijos varones -Guillermo, Jorge y Roberto-; su nieto, Wilfrido Stewart, fue heroico combatiente de la Guerra del Chaco. Y un par de generaciones después aparece en escena mi amigo Gero, que cumple años hoy, y que, a mi requerimiento, consultó a su tía sobre el escudo familiar.
Ella le envió el escudo de armas "que figura en el árbol genealógico" de la familia:
Como sea, el linaje de Guillermo Stewart, escocés venido a Sudamérica, que llega hasta mi amigo Gero, nos ha permitido, una vez más, disfrutar de la belleza de la Heráldica... y seguiremos investigando.
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