Hoy es la fiesta de Nuestra Señora de la Merced, de tanto arriago en la piedad popular en todas partes del mundo. En la Argentina es patrona de varias localidades, entre ellas Tucumán, donde se encuentra la imagen a la que Manuel Belgrano le entregó su bastón de mando, proclamándola Generala del Ejército, tras la victoria obtenida en la Batalla de Tucumán justamente en el día de su fiesta, 24 de septiembre de 1812.
Esa es la imagen que vemos bajo estas líneas, cuyo manto está adornado con el Escudo Nacional y el escudo de la ciudad de San Miguel de Tucumán (al que nos referimos en la entrada del 9 de julio). En la peana puede apreciarse, además, un escudo pontificio.
Dicha imagen histórica de la Virgen de la Merced es venerada en la Basílica de Nuestra Señora de la Merced en San Miguel de Tucumán.
Al bello escudo de esa basílica nos hemos referido extensamente en una de las primeras entradas de este Blog, el 2 de julio de 2010.
El blasón reúne el color sinople muy apropiado para evocar al Jardín de la República, el bastón de mando ofrecido por Belgrano, la banda argentina propia de la condición de Generala que ostenta la Virgen de la Merced, y la estrella que es el símbolo universal de María.
A lo ya explicado en la entrada del 2 de julio de 2010, añadamos una imagen del pabellón, ombrellone o umbela de la Basílica:
En los semicírculos que forman las franjas rojas en su parte inferior, pueden verse el escudo basilical y el escudo de la Orden de la Merced. Hay tres franjas rojas más que no están a la vista, y podemos suponer que otros escudos las adornan.
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