La ciudad de Rojas, cabecera del partido homónimo, está ubicada en el noroeste de la provincia de Buenos Aires, a 240 kilómetros de la Capital Federal.
En el año 1777 -pocos meses después de su asunción como primer Virrey del Río de la Plata- Pedro de Cevallos encomendó al sargento mayor Diego Trillo la instalación de un fortín en el paraje ya conocido entonces como "La Horqueta de Rojas", en el ángulo oeste de la confluencia del río Rojas y su afluente el arroyo Saladillo de la Vuelta.
La orden se cumplió el 20 de diciembre de 1777, fecha que es considerada la fundacional de la ciudad de Rojas.
Leemos en Wikipedia: "Habiendo llegado a la zona con 30 hombres y el material traído desde Pergamino y Buenos Aires, Trillo levantó el fortín, una simple empalizada de palo a pique de ñandubay, sobre la margen derecha del arroyo en el paraje conocido como La Horqueta de Rojas, en el ángulo oeste de la confluencia del río Rojas y su afluente el Arroyo Saladillo de la Vuelta. Para el 3 de enero estaban concluidos el alojamiento para la tropa y el del oficial (ranchos techados con paja), un pozo de balde, un mangrullo y un corral. Faltos de madera, la cocina y el local de guardia debieron esperar. El fortín contaba con un foso y montaba cuatro pequeños cañones, uno por lado".
Leemos en Wikipedia: "Habiendo llegado a la zona con 30 hombres y el material traído desde Pergamino y Buenos Aires, Trillo levantó el fortín, una simple empalizada de palo a pique de ñandubay, sobre la margen derecha del arroyo en el paraje conocido como La Horqueta de Rojas, en el ángulo oeste de la confluencia del río Rojas y su afluente el Arroyo Saladillo de la Vuelta. Para el 3 de enero estaban concluidos el alojamiento para la tropa y el del oficial (ranchos techados con paja), un pozo de balde, un mangrullo y un corral. Faltos de madera, la cocina y el local de guardia debieron esperar. El fortín contaba con un foso y montaba cuatro pequeños cañones, uno por lado".
Ese emplazamiento original fue levantado en 1780 para su relocalización en el que sería asentamiento definitivo de la ciudad.
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| Foto tomada del sitio web municipal |
La ciudad tiene un bello y expresivo escudo.
Es cuadrilongo, con el borde inferior redondeado. En campo de plata, una división en perla, de gules, fileteada de sable, cargada con una cruz romana de oro en la confluencia de las tres ramas; cada rama está cargada a su vez con dos aves de oro orientadas a la diestra.
En el cantón superior un castillo de oro, con la puerta abierta; en cada cantón de los flancos, un soldado de pie con una lanza y una espada de su color, sombrero de azur, casaca de azur con banda y franja de plata cruzadas, pantalones de gules y botas de su color; ambos están simétricos, en espejo.
Como timbre, una gran corona mural de piedras sillares de oro, masonadas de sable, con cuatro torres visibles almenadas con dos ventanas y una puerta de gules cada una, separadas entre sí por una silueta de azur cargada con un macle de gules y separada del blasón por un tangle de gules
La "perla" o palio alude a la confluencia de los ríos Saladillo de la Vuelta y Rojas, es decir a la "horqueta" junto a la cual se estableció el primitivo fuerte, representado en el castillo, que dio origen a la ciudad.
Las figuras en uniforme militar recuerdan la Guardia de Rojas. La Guardia de Rojas o de San Francisco de Rojas fue un puesto fortificado que integró la línea de defensa del territorio de Buenos Aires en su frontera con el indio.
La cruz simboliza el legado cristiano. La corona mural destaca su categoría de ciudad.
La fecha de esta entrada fue elegida en homenaje a un amigo que cumple años hoy.
En la foto tomada del sitio web las aves están mirando a siniestra...
ResponderBorrarEs verdad. Seguramente un error del que pintó el escudo allí...
BorrarLa corona del escudo para nada cumple la regla de la simetría. Es muy grande para el escudo.
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