Escudos departamentales de La Rioja (1 de 18)
Tal como anunciamos ayer, recorreremos en varios jueves los escudos y emblemas de diversos departamentos de La Rioja. El primero de ellos en orden alfabético es Arauco. Tomamos los datos -que citamos con diversos ajustes gramaticales y ortográficos y entresacando lo que podemos de una redacción accidentada y extraña- de un sitio local.
«Nuestro escudo nace por la extraordinaria inquietud del Ingeniero Agrónomo Don Cornelio Sánchez Oviedo, a quien mucho se le debe como precursor de nuestra olivicultura. Don Cornelio Sánchez Oviedo nació en Catamarca el 15 de enero de 1898, y hacia el año 1932 se desempeñaba como Jefe de Sanidad Vegetal con jurisdicción en las provincias de La Rioja y Catamarca».
«El propósito del Ingeniero Cornelio Sánchez Oviedo, con el diseño que realizó, fue honrar en un escudo heráldico el majestuoso olivo de Arauco. La presentación del bosquejo del escudo a las Autoridades Municipales del Departamento Arauco, se hizo en el año 1942 (cuando se realizó la Primera Fiesta del Olivo, como se la llamó en un principio), y aunque no fue oficializado se lo utilizó en la mayoría de las fiestas del Departamento.
Luego, según antecedentes obrantes en el año 1957, el escudo fue impuesto por el entonces Intendente Municipal Don Julio Cesar García, en toda la documentación de la Administración Municipal»
Por último, en 1982, durante la gestión municipal del Intendente Rodolfo Laureano De Priego, se encomendó al entonces Secretario General del Municipio «la recopilación de datos sobre el escudo»; el funcionario «efectuó además algunas reformas en el diseño y determinó su simbolismo»; de esa manera se dejó definitivamente instituido este escudo como símbolo departamental.
Simbolismo del escudo:
«El escudo tiene un "tau" o "tao" que significa el símbolo de la cruz, [es decir] la devoción de Nuestro Señor Jesucristo en el Misterio de la Santa Cruz».
En el tao hay un olivo «como pieza honorable del escudo» y evocación del «árbol histórico».
«La corona según la intención de Cornelio Sánchez Oviedo significaba tener en cuenta que nuestro pueblo» reconocía sus raíces españolas.
«El sol pertenece a nuestro Escudo Nacional».
«En los espacios azules tenemos: a: (...) el símbolo de nuestra herencia diaguita (el arco y dos flechas cruzadas); b: la estrella», que representa la protección divina «sobre el pan de nuestro pueblo, como alusión al trabajo y progreso».
La descripción no respeta las convenciones heráldicas, pero el escudo, aunque mejorable, es bastante digno.
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