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lunes, 11 de febrero de 2019

Escudo de la Congregación Hijos de Santa María Inmaculada

La parroquia porteña de San Felipe Neri está confiada ad nutum Sanctae Sedis a los padres de la Congregación Hijos de Santa María Inmaculada. La familia religiosa fue fundada por el Venerable José Frassinetti.

En la sede parroquial -donde tomamos las fotos de esta entrada en mayo del año pasado- y también en su sitio web se ve el escudo de dicha congregación, que hoy mostraremos. La imagen que sigue es un detalle de una cartelera parroquial. 


De oro, cargado con un lirio de su color, una flecha de su color puesta en palo y un fresno de su color. Jefe de azur, cargado con una estrella de oro de seis puntas. Timbrado con corona real. Lema:  "Monstrate Esse Matrem Iter Para Tutum",  que se traduce como "Muéstrate Madre  y danos un camino seguro".

En el sitio Heráldica de Chile encontramos esta imagen:

En un sitio oficial de la Congregación en italiano se aportan estos datos acerca del escudo, que traducimos con alguna libertad:
El escudo fue concebido y diseñado por el P. Quirino Proni. Figura en el retablo de mármol del altar de la Capilla del Instituto Eclesiástico de Roma, inaugurado en 1947. El escudo apareció por primera vez en una publicación interna en 1953.
El campo azul de la sección superior del escudo simboliza lealtad, justicia y buena reputación, pero sobre todo  hace referencia al mar y el cielo, donde brilla la estrella, un símbolo no sólo de acciones magnánimas, sino sobre todo de la Santísima Virgen, que es el centro de toda la vida espiritual de los Hijos de María (hacia ella se dirige la flecha del centro del escudo).
El fondo del campo inferior es de oro, el metal más noble, que expresa fuerza, perseverancia y nobleza en las obras. 
A diestra hay un lirio de jardín, un símbolo heráldico tradicional de la pureza y la castidad. A siniestra, un robusto fresno (en italiano: frassino), símbolo de fidelidad y recuerdo  del iniciador de los Hijos de María Inmaculada, José Frassinetti.
El escudo está timbrado con una corona real, símbolo del culto dedicado a la Reina de los Ángeles, Soberana de la Congregación.
La banda flotante no es un mero adorno:  lleva una ardiente invocación a la Virgen, de todos sus hijos: "Muéstrate siempre Madre con nosotros, prepáranos un camino seguro...  Un camino directo a la meta, sin incertidumbres ni sobresaltos,  iluminado por tu materna sonrisa".


Publicamos esta entrada en el aniversario de la primera  aparición de la Virgen en Lourdes, sitio en el que más tarde dijo "Yo soy la Inmaculada Concepción".

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